Una catarata es una opacidad de la transparencia normal del cristalino del ojo. En el caso de las personas que tienen cataratas, ver a través de cristalinos opacos es un poco como mirar a través de una ventana empañada o escarchada. La visión nublada consecuencia de las cataratas puede dificultar tareas como leer, conducir un auto (especialmente de noche) o ver la expresión del rostro de un amigo. La mayoría de las cataratas se desarrollan lentamente y no alteran la vista en etapas tempranas.
Sin embargo, con el tiempo, las cataratas terminarán interfiriendo en tu visión
Al principio, una mayor iluminación y unos anteojos pueden ayudarte a lidiar con las cataratas. No obstante, si la alteración de tu visión interfiere en tus actividades habituales, podrías necesitar una cirugía de cataratas. Afortunadamente, la cirugía de cataratas por lo general es un procedimiento seguro y eficaz.
Las seniles son las más frecuentes, y tiene estrecha relación con la edad.
Las metabólicas son aquellas que aparecen asociadas a enfermedades metabólicas, una de las más frecuentes es la Diabetes Mellitus.
Algunas personas nacen con cataratas o estas se manifiestan durante la infancia. Estas cataratas pueden ser genéticas o estar relacionadas con una infección intrauterina o un traumatismo.
Estas cataratas también pueden deberse a determinadas afecciones, como distrofia miotónica, galactosemia, neurofibromatosis tipo 2 o rubéola. Las cataratas congénitas no siempre afectan la visión, pero si lo hacen generalmente se extraen apenas se detectan.
Son aquellas que se producen luego de un traumatismo ocular.
Cataratas que afectan el centro del lente (catarata nuclear). Una catarata nuclear puede al principio provocar miopía alta o incluso una mejora temporal en la visión de lectura. Sin embargo, con el tiempo el lente se vuelve gradualmente más amarillo y opacifica más la visión.
A medida que la catarata avanza lentamente, el lente incluso puede adquirir un tinte marrón. El color amarillento o amarronado avanzados del lente puede provocar dificultad para distinguir tonos de colores.
Una catarata cortical comienza como opacidades blanquecinas en forma de cuña o estrías en el borde exterior de la corteza del lente. A medida que avanza lentamente, las estrías se extienden hasta el centro y afectan la luz que pasa a través del centro del lente.
Una catarata subcapsular posterior comienza como una pequeña área opaca que normalmente se forma cerca de la parte posterior del lente, justo en el paso de la luz. Una catarata subcapsular posterior a menudo afecta la visión de lectura, reduce la visión con luz brillante y provoca resplandor o halos alrededor de las luces a la noche. Estos tipos de cataratas tienden a avanzar más rápido que los otros tipos.
La mayoría de los casos de cataratas se manifiestan cuando la edad o una lesión cambia el tejido que forma el lente de tu ojo. Algunos trastornos genéticos hereditarios que provocan otros problemas de salud pueden aumentar el riesgo de padecer cataratas. Las cataratas también pueden ser provocadas por otras afecciones oculares, cirugías anteriores de ojos o afecciones como la diabetes. El uso de medicamentos esteroides a largo plazo también puede provocar cataratas.
El lente, donde se forman las cataratas, se ubica detrás de la parte coloreada del ojo (iris). El lente focaliza la luz que ingresa al ojo, y produce imágenes nítidas y agudas en la retina, que es la membrana del ojo sensible a la luz que funciona como el carrete fotográfico que colocamos en una cámara. A medida que creces, los lentes de tus ojos se hacen menos flexibles, menos transparentes y más gruesos. Algunas afecciones relacionadas con la edad y de otro tipo hacen que los tejidos dentro del lente se rompan, se aglutinen y opacifiquen pequeñas zonas dentro del lente. A medida que la catarata crece, la opacidad se hace más densa y afecta una parte más grande del lente. La catarata se dispersa y obstruye la luz que pasa por el lente, y evita que una imagen nítidamente definida llegue a la retina. Como consecuencia, la visión se vuelve borrosa. Las cataratas generalmente se desarrollan en ambos ojos, pero no de manera uniforme. Es posible que la catarata en un ojo esté más avanzada que en el otro, y provoque una diferencia de visión entre los ojos.
Los factores que aumentan el riesgo de padecer cataratas incluyen los siguientes:
Envejecimiento
Diabetes
Exposición excesiva a la luz del sol
Fumar
Obesidad
Presión arterial alta
Lesión o inflamación anterior del ojo
Cirugía anterior de ojos
Uso prolongado de medicamentos corticoesteroides
Beber alcohol en exceso
Los signos y síntomas de las cataratas incluyen los siguientes:
Visión opaca, borrosa o tenue
Mayor dificultad para ver de noche
Sensibilidad a la luz y el resplandor
Necesidad de luz más brillante para leer y realizar otras actividades
Visión de «halos» alrededor de las luces
Cambios frecuentes en la prescripción de sus anteojos o lentes de contacto.
Pérdida de colores o color amarillento
Visión doble en un solo ojo
Pide una consulta para realizarte un examen ocular si notas cambios en la visión. Si manifiestas cambios repentinos en la visión, como visión doble o destellos, dolor repentino de ojos o cefalea repentina, consulta con el médico de inmediato.
Cuando no puedes ver bien con tus lentes recetados, el único tratamiento efectivo para las cataratas es la cirugía.
Consulta con el oculista para saber si la cirugía es adecuada para ti. La mayoría de los oculistas sugieren considerar la cirugía de cataratas cuando estas comienzan a afectar tu calidad de vida o tu capacidad de realizar actividades habituales, como leer o conducir de noche. Depende de ti y del médico decidir si la cirugía de cataratas es adecuada para ti. Para la mayoría de las personas, no hay apuro en extraer las cataratas porque generalmente no dañan el ojo. Sin embargo, las cataratas pueden empeorar más rápido en las personas que padecen diabetes. Demorar el procedimiento generalmente no afectará la recuperación de tu visión si más adelante decides realizarte la cirugía de cataratas. Tómate tu tiempo para considerar los beneficios y riesgos de la cirugía de cataratas con el médico. Si eliges no realizarte la cirugía de cataratas ahora, el oculista puede recomendarte exámenes de seguimiento periódicos para ver si las cataratas avanzan. La frecuencia con la que verás al oculista dependerá de tu situación.
En la cirugía de cataratas se extrae el lente nublado y se reemplaza con un lente artificial transparente. El lente artificial, llamado lente intraocular, se coloca en el mismo lugar que tu lente natural. Es una parte permanente de tu ojo. En algunas personas, otros problemas oculares impiden el uso de un lente artificial. En estos casos, una vez que se extrae la catarata, es posible corregir la visión con anteojos o lentes de contacto. La cirugía de cataratas generalmente se realiza de manera ambulatoria; es decir, que no tendrás que permanecer en el hospital después de la cirugía. Durante la cirugía de cataratas, el oculista utiliza anestesia local para insensibilizar el área alrededor del ojo, pero generalmente el paciente está despierto durante el procedimiento. Por lo general, la cirugía de cataratas es segura, pero implica riesgos de infección y sangrado. La cirugía de cataratas aumenta el riesgo de desprendimiento de retina. Después del procedimiento, sentirás molestia durante algunos días. La cicatrización generalmente se produce en un plazo de ocho semanas. Si tienes que realizarte la cirugía de cataratas en ambos ojos, el médico programará la cirugía para extraer la catarata en el segundo ojo después de que te hayas recuperado de la primera cirugía.
NUESTRA MISIÓN: Como Entidad Privada es nuestro compromiso llegar a nuevas fronteras en el tratamiento de las enfermedades oculares, en un mundo donde la ciencia y la tecnología se integran plenamente a la vida diaria, nuestra responsabilidad es seguir de forma paralela ese camino, actualizándonos constantemente para ofrecer los mejores resultados a nuestros pacientes. Manteniendo de esta forma la reputación de Mejor Centro Oftalmológico de Corrientes.
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La decisión de elegir un médico oftalmólogo para la atención de su vista es muy importante; confiará en su oftalmólogo para salvaguardar su precioso sentido de la vista y ayudará a mantener una buena visión de por vida. Un oftalmólogo es un doctor en medicina que se especializa en el cuidado de los ojos y la vista.
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